Kevin Smith se hizo famoso en 1994 por Clerks, película que escribió, dirigió y en la que interpreta a Silent Bob.
La película se hizo popular en poco tiempo en parte por la cercanía de los diálogos y la simpatía y extravagancia de los personajes. Ganó algunos premios del público y esto llamó la atención de Miramax Films que adquirió la cinta.
Kevin invirtió unos 25000$ en hacer Clerks y recaudó más de 3 millones. Todo un éxito que le lanzó a la fama y le permitió dedicarse a su afición de crear cine. Más adelante en su carrera creó la segunda y tercera parte de Clerks.
Su estilo juvenil y desenfrenado puede no ser del gusto de todos, pero desde luego que como orador no tiene precio.
Escuchando alguna de sus charlas se confirma que es un personaje con los pies en la tierra y muy divertido. También da algunos consejos a aspirantes a directores que no tienen desperdicio.
“Que no te digan lo contrario: El objetivo principal en la vida profesional debe ser siempre que te paguen por ser tú mismo”
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